miércoles, 3 de noviembre de 2010

¿Convivir Con La Crisis?

¿Qué hacer cuándo creemos que no podemos afrontar una crisis considerada por nosotros negativa o cualquier cambio? ¿Cuándo, a pesar del tiempo transcurrido, nuestros problemas, parecen no querer irse?
Una opción podría ser aprender a convivir con esa crisis. No solo adaptarnos a ella, sino cohabitar con ese cambio, y hacerlo parte de nuestra vida, llegar a entendernos con ese problema que nos impide ser del todo felices.

Si el cambio es por ejemplo, de tipo económico, y nuestro estado anímico, no se ve muy alterado por él, aprender a cambiar nuestros hábitos de consumo y nuestras preferencias diarias, es una buena opción para afrontar esa situación económica nueva.

Pero, si es una crisis más bien personal, el hecho de cambiar nuestro modo de vida, tal vez no sea del todo suficiente para mejorar como nosotros deseáramos.

Aunque no hay una receta mágica que nos quite todos nuestros problemas, si que existe algo mágico que está dentro de de cada uno de nosotros. Y es la capacidad de prestar atención a los problemas, para poder resolverlos.

Porque lo primero, para poder afrontar cualquier acontecimiento de la vida, es ser conscientes de que algo no funciona del todo bien.

El cuerpo nos suele avisar de los problemas. Así, cuándo nos duele una pierna, un brazo o la cabeza, solemos ir al médico, para intentar solucionar el dolor.

Sin embargo, hay veces, que no le prestamos atención a esa molestia: - Ya remitirá, pensamos. - Me tomo una aspirina y voy tirando, decimos. Y continuamos nuestra vida sin querer pensar en ello.

Hasta que un día, ese dolor se agrava o esas limitaciones se vuelven más acentuadas, y ya no podemos obviarlas. Entonces, sí, vamos al médico de modo urgente, con la esperanza de que el dolor desaparezca rápido.

Con los problemas psicológicos, nos pasa algo parecido, aunque nos cuesta mucho más, acudir a un especialista para tratarnos.

Vamos acumulando en nosotros, pequeños traumas y miedos, que poco a poco, y sin querer darnos cuentas, se transforman en una montaña.

Nos levantamos sin ganas de nada, o evitamos coger un ascensor o lloramos casi todos los días (en ocasiones sin razón aparente).

Estas circunstancias, van haciendo de nuestro día a día, una especie de batalla que superar. Vivimos alertas, con miedo y mucho estrés. – Mañana será otro día, pensamos sin creérnoslo mucho. – Antes era una persona alegre, no entiendo que me está pasando, decimos.

Te propongo, tres cosas:

1. Si quieres comenzar a superar ese cambio, te puede ayudar leer libros de autoayuda. O algo mucho mejor: hacer tu propio libro de autoayuda.

Tú eres la persona que más te conoce. Eres tú, la que sabes que problemas no cuentas a nadie (tal vez para no molestar) y la que está a cada minuto en tu cabeza.

Cómprate una libreta de color vivo (rojo, naranja, verde), y prepárala antes de nada. Recuerda cuando eras niño y haz un dibujo lleno de colores, en la primera página. Dedica tiempo a ello. Luego, haz el índice del libro. Esboza unos diez capítulos, centrándote en aquellas cosas que quieres superar, utilizando para ello, deseos, afirmaciones positivas y cambios en tu conducta.

Por ejemplo, el capítulo primero, podría titularse: “Sin vergüenza”. El deseo: “Entrar en una tienda a descambiar una prenda de ropa”. Las afirmaciones positivas: “Soy una persona sin complejos, me gusto y me acepto tal y como soy. Nadie sabe mis temores. Todo está en mi cabeza. Sé que soy capaz de hablar sin vergüenza, y sin complejos”. Por último la conducta: “Ir a la tienda y descambiar la prenda de ropa”.

2. En segundo lugar, si eres una persona reservada con sus problemas y te los guardas para ti solo, cuéntale a alguien de tu confianza, lo que te corroe. El hecho de hablar con esa otra persona, te puede ayudar a encontrarte mejor e incluso a buscar soluciones conjuntas (siempre, teniendo en cuenta, que la última persona que ha de tomar una u otra decisión eres tú).

3. En tercer lugar, que acudas y pidas ayuda a un especialista (ya sea a un psicólogo o a tu médico de cabecera para que te derive al especialista), si los problemas acumulados se han hecho dueños de tu vida y no eres capaz de afrontarlos solo, y para ti, ha transcurrido mucho tiempo desde el inicio de la crisis.


Y sobre todo, concéntrate en las cosas y personas que tienes cerca. Hay mucho de bueno en tu vida.

Recuerda: Eres una persona muy afortunada.

Estas viva.


Disfruta de la vida :-)

8 comentarios:

Soñadora dijo...

Me gusta mucho la claridad con que analizas la situaciones y los oportunos consejos que brindas Carol.
Gracias!

WWW.LEYCOSMICA.ORG dijo...

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Audi A3 dijo...

Gracias Carol por tu artículo. Realmente hay que cambiar "el chip" y eliminar el componente psicológico de cualquier crisis,...en el fondo es una cuestión de actitud. Tu actitud ante las cosas hará que sean de una forma u otra. Tan simple y real que asusta, pero es así! ( es que hoy en dia nos asustan las cosas comunes, el campo, la desnudez, los animales,.....y en cambio no nos asusta tener un robot limpiando la casa jejeje )

Carol dijo...

Gracias Soñadora por todos tus comentarios ;) Me gustan mucho! Besos

Gracias Audi A3! Y de nada :) Es así, la actitud es fundamental! Un abrazo

Miguel Vender dijo...

wao, que buen tema, es cierto, somos la base fundamental que refuerza y debilita nuestros problemas, nunca hay que perder el optimismo porque sino todo se nos viene abajo, somos atractivo de problemas o de soluciones, me encantó tu tema

capital privado dijo...

Yo estoy pasando por una crisis matrimonial, y realmente me está costando entender y cambiar porque tanto mi psicóloga como la de mi esposo me dicen que he sido tan buena madre, tan buena esposa y tan buena ama de casa que me olvidé de ser mujer y eso alejó a mi marido que a su vez está tan cómodo y bien de esa manera que no hará nada cambiar la situación de pareja.

betfair dijo...

Me siento muy identificada con lo que escribes. ¿Podrías recomendarme un buen libro de autoayuda? Llevo 4 años pensando en ir a ver a un psicólogo pero no paso por mi mejor situación económica, así que si puedes decirme de algún libro que te haya ayudado me harías un favor.
Un saludo y gracias por tus posts

Heliplane, tienda de helicopteros dijo...

Muy buenos consejos, gracias : )