miércoles, 3 de diciembre de 2014

Baila, canta, ríe…

Esta semana te voy a proponer un reto…

Cada día desde que leas esto, me gustaría que realizaras aunque solo sea una vez, alguna de las acciones que te voy a decir ahora.
La idea es que dediques aunque solo sean unos minutos a estas actividades.
Solo una cosa cada vez. Es sencillo…
Las acciones son estas:
1. Baila. Levanta de la silla o del sofá y muévete como si el viento te meciera. Mueve brazos, piernas, cabeza… da vueltas sobre ti mismo. Si te da apuro hazlo mientras estés sola. Sino… Compártelo con los tuyos. Seguro que pasáis un rato divertido.
2. Canta. Canciones de tu infancia o actuales. Inventadas o tatareadas… No importa cuales ni como… tan solo canta y siente las sensaciones que te produce la música.
3. Ríete. La risa es un bálsamo para todo. Aunque no tengas ganas, ríete… abre la boca para hacerlo… No te quedes en la media sonrisa… No se trata de eso. Se trata de reír a ser posibles a carcajadas, con ganas… como si te hubieran contando el peor (o el mejor) chiste del mundo.
4. Abraza. Abrázate a ti mismo. Rodéate con tus brazos y mécete como si alguien te estuviera abrazando. Expresa en voz alta afirmaciones como: me quiero, soy una persona maravillosa, todo está bien… Cuando lo hayas hecho contigo misma, acércate a quien tú quieras y pídele un abrazo. Seguro que le gusta la idea.
5. Verbaliza tus emociones. En este día ve a un espejo y mírate un momento. Observa cada rasgo de tu cara y di como te sientes en voz alta. Piensa si tienes algún sentimiento escondido que no te deja ser todo lo feliz que quieres. Después, expresa también en voz alta y mirando al espejo un deseo que anhelas. Y cree que es posible. Todo es posible. Cuando lo hayas hecho, ve a esa persona a la que tanto quieres y dile lo que sientes. Hoy va a ser un gran día.
6. Sé consciente de tu respiración. Ser consciente de que a cada segundo que pasa nuestro cuerpo no deja de moverse. Respiramos a cada instante y no somos conscientes de ello. Muchas veces nuestra respiración se vuelve rápida e inconstante y eso nos produce dolores de cabeza, miedos repentinos, sensaciones de ahogo… Siéntate en un lugar cómodo y pon una mano en el pecho y la otra debajo del ombligo. Siente como entra y sale el aire de tu cuerpo. Acompaña la acción con afirmaciones positivas. La vida es maravillosa.
7. Imagina que no hay un mañana… Carpe Diem. El último día de tu semana recuerda en algún momento que ya no tendrás más horas, ni minutos para compartir tus bailes, cantes, risas, abrazos y emociones. Echa una mirada a la semana que has tenido y piensa si ha merecido la pena esas pequeñas acciones que has hecho cada día. imagina que ya no estarás aquí mañana… ¿Qué te falta por hacer o por decir? Si hay algo… hazlo, dilo… No te quedes con las ganas de vivir.


2 comentarios:

Gemma dijo...

Gracias Carolina, me encantó este post! son cosas que realmente deberíamos hacer cada día para sentirnos más felices, pero sí, empezaremos con una cada día.. siempre se aprenden cosas visitándote.. saludos y abrazos!

Carol dijo...

De nada Gemma :) ¡Muchas gracias!!! :D Me gusta saber que te gustó el post. Besos :)