Tú controlas tu miedo.
Tal vez, si en estos momentos tienes mucho miedo a algo concreto, esa afirmación, no la creas. En ocasiones el miedo parece escapar de nuestras manos y nos envuelve, dejándonos agotados y sin apenas respiración.
Es curioso como el miedo al miedo, nos paraliza casi tanto o más que cualquier otro temor.
Cuando sabemos o creemos que una determinada situación nos paraliza a causa del miedo, intentamos evitar cualquier circunstancia que nos lo recuerde.
El miedo progresa contigo.
Cuando era niña, tenía miedo a la oscuridad. No me podía dormir si estaba todo completamente apagado. Recuerdo taparme con las sabanas en pleno mes de agosto, a pesar de tener calor, por miedo a las tinieblas.
Sin embargo, cuando crecí pude comprobar lo irracional de mi miedo. No pasaba nada en la noche. La oscuridad no me atraparía sin remedio y me haría su presa.
Después, en la adolescencia mis miedos fueron muchos. Miedo a hablar en público, a relacionarme, miedo al dolor, a pasar vergüenza…
Muchos miedos se quedaron conmigo por unos años. No sabía entonces, que yo era quien mandaba sobre esos temores.
Intenta descubrir aquellos miedos que has superado a lo largo de los años. Es posible que te sorprendas de lo mucho que te afectaban y condicionaban tu vida.
Céntrate en los miedos que tienes ahora… ¿Se parecen a aquellos terrores de la infancia? ¿Has sabido distinguir entre las sombras de la noche, lo real de lo ilusorio?
Si la respuesta es no… no desesperes ni te pares.
Los miedos se pueden superar. Y tal vez, lo que tienes que hacer es afrontarlos… en muchos casos el temor desaparecerá.
Por ejemplo, desde hace muchos años, he tenido miedo a las intervenciones quirúrgicas. Imaginarme en un quirófano, me hacía sentir mucho miedo. No quería ni pensar en que tendría que pasar por algo así…
Sin embargo, mi mente me estaba preparando para el futuro… por entonces, ya tenía serias secuelas en los dedos de mis manos, a causa del brote de artritis idiopática juvenil que me dio con nueve años, y aunque no quería verlo, sabía que tendría que pasar tarde o temprano por una o varias operaciones...
Y ha ocurrido. He pasado por dos operaciones en estos dos últimos años.
Me he enfrentado a ese miedo que me avisó desde pequeña. Y lo he superado con éxito.
Ahora tengo las manos sin los dolores de antes y vivo mucho mejor y más feliz.
Por eso, te pregunto…
¿A qué tienes miedo?
Observa tu mente y analiza tus miedos.
Ellos, con su maestría, te ayudarán a superar lo que te propongas.
Créelo.
14 comentarios:
Una entrada muy buena, me a gustado mucho tu blog.
Un saludo
Eres grande. Como me gusta leer tus entradas. Esta especialmente. Un cariñoso abrazo.
Me gusta leer tu blog aunque nunca deje ningún comentario. Realmente es muy difícil superar lo miedos, parece que vayas a ser incapaz,pero es cierto si te pones a pensar en el pasado hay muchísimas cosas que antes creías que eran imposible que hicieras y a base de hacerlas ahora las hacer con total naturalidad. Una entrada muy buen y que ayuda mucho. Gracias
muy buen blog
estupenda informacion
Hola guapa, me ha gustado mucho esta entrada porque es cierto, en determinadas épocas de nuestra vida tenemos ciertos miedos que con el paso del tiempo nos parecen ridículos. Yo creo que si tenemos un miedo y recordamos eso, que mañana nos puede parecer ridículo es mas fácil afrontarlos.
Un besoteeee.
Que bueno es volver a leerte Carol, siempre das en el clavo.
Besos,
Muchas gracias helicopteros rediocontrol :) Un abrazo
Hola la.eu :D Muchas gracias ;) Muchos besos guapa
Hola Anónimo :) Me alegra que te hayas animado a escribir. Nuestra mente es muy poderosa, capaz de conseguir lo que nos propongamos ;) ¡De nada! Gracias por tu comentario. Un abrazo
Gracias ciberenfoque foro :) Un saludo
Hola foro ;) Gracias. Un saludo
Hola METAMORFOSIS :D ¡Gracias! Es cierto. Si recordamos a menudo que hemos afrontado muchas cosas, y hemos superado miedos, nos será más sencillo enfrentarnos a nuestros miedos actuales. Sabemos que podemos hacerlo ;) Muchos besos guapa
Hola Soñadora :) ¡Que bien! Me alegro ;) Gracias por tus palabras. Muchos besos
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